miércoles, 31 de octubre de 2007

- ARGENTORES -




QUE ES ARGENTORES




La Sociedad General de Autores de la Argentina -ARGENTORES- es una Asociación Civil de carácter profesional y mutual, constituída el 17 de diciembre de 1934. Tiene su domicilio legal en la ciudad de Buenos Aires.

Objetivos de ARGENTORES

La protección legal, tutela jurídica y administración de los derechos de autor y, a través de estas acciones, el enaltecimiento de la producción del autor destinada al teatro, cine, radio y televisión.

Perfil de la organización ARGENTORES es la única entidad del país facultada por Ley- 20.115/ 73 del 23 de enero de 1973- para percibir el derecho emergente de las obras utilizadas en todos los teatros, salas cinematográficas, emisoras radiales y canales de T.V (abierta y por cable) de Argentina; de las letras (novelas, episodios, argumentos, sketchs, radioteatros. etc) emitidos por los mismos medios de difusión; de la música orgánica de las óperas u operetas llevadas a escena o transmitidas en cines, emisoras y televisoras.





ARGENTORES desempeña su actividad en teatros, salas de cine, canales de T.V y radios de todo el país y representa, por convenios recíprocos con entidades similares y por contratos con agentes, representantes y apoderados, a la totalidad de los autores del mundo.

Actualmente ARGENTORES administra los derechos de dramaturgos, guionistas de radio, cine y televisión, coreógrafos y compositores de música para obras teatrales

ARGENTORES está facultada para conceder o negar el uso de las obras de sus socios en teatro, cine, radio y televisión, en el país y en el exterior; establecer las condiciones de esa utilización, fijar los aranceles correspondientes al derecho de autor y recaudar las sumas que devenguen las obras utilizadas.

Asimismo ARGENTORES tiene la representatividad para la defensa en juicio o ante quien corresponda, de los derechos del socio como autor, derechohabiente o simplemente representado, y para ejecutar todas las acciones derivadas de la aplicación de la Ley 11.723 sobre la propiedad intelectual y de las que se dicten en consecuencia.

martes, 30 de octubre de 2007

- LA EDUCACION -




La mediocridad educativa de América latina


Una de las cosas que más me impactaron en un viaje reciente a la India fue que, como parte de una creciente competencia por la excelencia educativa, los niños deben someterse a rigurosos exámenes de ingreso a partir del jardín de infantes.

¡Qué diferencia con lo que está sucediendo en América latina!, pensé.

En muchos países de la región hay tan poco énfasis en la calidad de la educación que uno puede ir desde el jardín de infantes hasta la grandes universidades -como la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) o la Universidad de Buenos Aires (UBA)- sin jamás haber tenido que aprobar un examen de admisión.

El contraste entre las exigencias a los estudiantes en la India y en América latina me vino a la mente mientras leía un nuevo reporte del Banco Mundial sobre la calidad de la educación en los países latinoamericanos. El informe es la crítica más devastadora sobre el nivel de la educación en la región.

Mientras en 1960 el porcentaje de gente que terminaba la escuela secundaria era del 7 por ciento en América latina y del 11 por ciento en Asia, actualmente los porcentajes son del 18 por ciento en América latina y del 44 por ciento en Asia.

A pesar de que la matrícula en América latina se duplicó en las últimas décadas, la región está quedando rezagada aun cuando se la compara con otros países en desarrollo o de ingreso medio, dice el reporte.

En América latina, los gobiernos están demasiado concentrados en construir escuelas y muy poco preocupados por la calidad de lo que se enseña dentro de ellas. Muchos países -incluyendo la Argentina, Venezuela y Cuba- frecuentemente se niegan a participar en exámenes internacionales estandarizados, o lo hacen pero luego se niegan a dar a conocer sus resultados.

Algunos de los ejemplos citados en el reporte:

-En el Programa Internacional para la Evaluación de Estudiantes (PISA), un test estandarizado que mide a los estudiantes de 15 años en matemáticas, lenguaje y ciencia, los países latinoamericanos terminaron entre los peores del mundo.

Mientras los estudiantes de Hong Kong, China, promediaron 550 puntos en matemáticas, 510 en lengua y 539 en ciencias; los de Corea del Sur promediaron 542, 534 y 538, respectivamente, y los chicos de Estados Unidos promediaron 483, 495 y 491 puntos, los estudiantes de México, Brasil, Chile, la Argentina y Perú obtuvieron alrededor de 400 puntos, y en algunos casos mucho menos.

-Incluso los estudiantes latinoamericanos de las clases sociales más aventajadas sacaron malos resultados en el examen PISA, "lo que derrumba el mito de que los estudiantes más privilegiados de la región reciben una educación de alta calidad , dice el informe.

-En el examen Tendencia Internacional del Estudio en Matemáticas y Ciencias (Timss), que mide a los estudiantes de octavo grado en matemáticas y ciencia, los únicos dos países latinoamericanos que participaron -Colombia y Chile- terminaron entre los últimos de la lista.

-El Estudio del Progreso en Alfabetización y Lectura Internacional (Pirls), que examina a los estudiantes de cuarto grado en lectura, los únicos dos países de América latina que participaron fueron la Argentina y Colombia. La Argentina terminó en lugar número 30 de 35 participantes, y Colombia, en el 31.

Condenados

Mi opinión: estos datos son trágicos para América latina, porque en la era actual de la economía del conocimiento, los países con sistemas educativos de mala calidad están condenados a largo plazo a un crecimiento más lento.

El éxito económico de China, la India y Europa del Este muestra que los países que apuestan a la calidad de la educación producen bienes más sofisticados y reducen la pobreza mucho más rápidamente que los que producen materias primas o bienes con poco valor agregado.

No estoy sugiriendo que los niños latinoamericanos sean sometidos a demoledores exámenes de ingreso al jardín de infantes. Sin embargo, los países latinoamericanos podrían, por lo menos, comprometerse a participar obligatoriamente en los exámenes internacionales estandarizados y a divulgar sus resultados. O sea, medirse a sí mismos respecto del resto del mundo y actuar en consecuencia. De otra forma, la mediocridad educativa condenará a los países de la región a quedarse cada vez más atrás frente al resto del mundo.

POST SCRIPTUM: El país latinoamericano que más está retrocediendo en materia educativa es Venezuela, donde Hugo Chávez acaba de anunciar un nuevo currículum dirigido a crear un "hombre nuevo" socialista. Mientras China y la India apuestan a las matemáticas, Venezuela va a enseñar ideología.

Por Andrés Oppenheimer
Opinión - La Nación

lunes, 29 de octubre de 2007

- PALABRA -




Citas y frases célebres sobre

"La Palabra"




Yo quiero vivir
cerca de tu palabra.
Víctor Manuel Sánchez

La palabra tiene
mucho de aritmética:
divide cuando se utiliza
como navaja, para lesionar;
resta cuandos e usa
con ligereza para censurar;
suma cuando se emplea
para dialogar,
y multiplica cuando se
da con generosidad para servir.
Carlos Siller

Un caballero se averguenza
de que sus palabras sean
mejores que sus hechos.
Confucio



La palabra es libre;
la acción muda;
la obediencia, ciega.
Schiller

Las palabras son ráfagas
de viento, pero al propagarse
lo mismo pueden producir
frutos que daños y ruina.
Chuang-Tzu

Se necesitan dos años para
aprender a hablar y sesenta
para aprender a callar.
Ernest Hemingway

La diferencia entre
la palabra adecuada y
la casi correcta es la misma
que entre el rayo y la luciérnaga.
Mark Twain

Háblame para que yo te vea.
Séneca


Por tus palabras habrás
de ser justificado y por
tus palabras serás condenado.
Jesucristo

El mejor método para cumplir
con la palabra empeñada
es no darla jamás.
Napoleón Bonaparte



Nunca juzgo a un hombre
por lo que dice, sino
por el tono con que lo dice.
Charles Peguy

Más le vale a un hombre
tener la boca cerrada,
y que los demás le
crean tonto, que abrirla y
que los demás se
convenzan de que lo es.
Pitágoras

Muchas palabras no
indican mucha sabiduría.
Tales de Mileto

Una palabra hiere más
profundamente que
una espada.
Richard Burton

¿Beso? Un truco encantador
para dejar de hablar cuando
las palabras se tornan superfluas.
Ingrid Bergman

El hombre es el único
animal que come sin tener
hambre, bebe sin tener sed
y habla sin tener nada que decir.
Mark Twain


Si uno no tiene la mente abierta,
también debe cerrar la boca.
Sue Grafton


Más vale una palabra a
tiempo que cien a destiempo.
Miguel de Cervantes

Cuando la necesidad nos
arranca palabras sinceras,
cae la máscara y
aparece el hombre.
Lucrecio

Tenemos dos orejas y una sola boca,
justamente para escuchar
más y hablar menos.
Zenon de Citión

Las palabras son como las hojas.
Cuando abundan,
poco fruto hay entre ellas.
Pope

Bendito sea el hombre
que no teniendo nada qué decir,
se abstiene de demostrárnoslo
con sus palabras.
Thomas S. Eliot

Lo que decimos no siempre
se parece a nosotros.
J.L. Borges

Sea esta la regla de
nuestra vida:
decir lo que sentimos,
sentir lo que decimos.
En suma, que la palabra
vaya de acuerdo con
los hechos.
Séneca

Una palabra es suficiente
para hacer o deshacer
la fortuna de un hombre.
Sófocles

El que sabe hablar,
sabe también cuándo.
Arquímedes

Una palabra mal colocada,
estropea el más bello
pensamiento.
Voltaire

Las palabras elegantes
no son sinceras;
las palabras sinceras
no son elegantes.
Lao-Tsé

Manejar el silencio es
más difícil que manejar
la palabra.
Georges Clemenceau

La palabra es el vehículo
de la inteligencia, y la
inteligencia es la señora del
mundo material.
Benjamín Constant

Quien pudiendo decir algo
en diez palabras usa veinte,
es capaz de cualquier
otra mala acción.
Aldo Cammarota

domingo, 28 de octubre de 2007

- AMNESIA -




La memoria perdida:

archivos, desidia y falta de información

Entre funcionarios que al terminar su período se llevan los papeles y aquellos que la destruyen por considerarla poco importante, la calidad de la documentación en nuestro país sigue siendo mala.

Por Laura Zommer
Enfoques - La Nación


Si tienen que hacer ciertas cosas, háganlas rápido y vuelvan lo antes posible a la normalidad." Las palabras de Henry Kissinger al interventor militar en la Cancillería argentina, César Guzzetti, dos meses y medio después del golpe del 24 de marzo de 1976, quedaron registradas en un memo de aquella reunión -uno de los cerca de 70 mil documentos de la CIA y de los departamentos de Estado y de Defensa norteamericanos sobre la represión de las dictaduras del Cono Sur que ha logrado desclasificar el National Security Archives (NSA)- que hoy prueba de manera categórica que el gobierno de los Estados Unidos siempre estuvo al tanto de la represión ilegal en la Argentina.

Además de servir para reescribir la historia oficial, la documentación obtenida -haciendo uso de la Freedom of Information Act (FOIA), la ley de acceso a la información de ese país- fue fundamental para esclarecer el destino de una docena de desaparecidos en la Argentina, cuyas familias venían peregrinando vanamente en busca de información desde hacía varios años.

Sólo con este ejemplo, uno de los miles que han ocurrido en el mundo gracias a la desclasificación de información oficial, uno entiende que la confección y conservación de documentos de la administración pública no es un mero capricho de archiveros aburridos o funcionarios fanáticos por juntar papeles, sino que puede ser clave para reconstruir o rectificar procesos históricos y para rescatar del dolor de la incertidumbre a familias enteras. La gran Historia y la pequeña historia individual coinciden en este punto.

En Argentina, sin embargo, entre funcionarios que al terminar su período se llevan los papeles a casa, otros que alteran la información de sus computadoras para no dejársela a los sucersores y algunos que por ignorancia destruyen documentos que consideran poco importantes, la calidad de la documentación en nuestro país -en los niveles nacional, provincial y municipal-todavía es mala.

Según quién sea el interlocutor, por supuesto, el diagnóstico será más o menos grave.

Pedro Victorio Bevilacqua, subdirector del Archivo General de la Nación, repite la misma frase que ya crispó a sus jefes hace algún tiempo: "Estar en el Archivo es estar sentado sobre una montaña de oro. Pero, nos dan dos chapas de cartón y nos dicen: "Tápenlo".

Pero Marta Oyhanarte desafía: "Este es el período de la historia argentina en el que más se trabajó y avanzó a nivel nacional en estos temas de acceso a la información. Desafío a cualquiera a que me pruebe lo contrario". Sin embargo, la titular de la Subsecretaría para la Reforma Institucional y Fortalecimiento de la Democracia, el organismo que debe hacer cumplir el Decreto 1172 de diciembre de 2003 -que prevé un reglamento para acceder a información de la administración central-, reconoce que falta mucho y que "hay aún carencias y, una de ellas, es la cuestión del registro, la organización de la información oficial y su archivo".

Aunque más crítico, Bevilacqua, el hombre que custodia un tesoro en donde hay desde fotos de la vida cotidiana en la época colonial hasta decretos recientemente firmados por Kirchner, también reconoce avances: el aumento previsto en el presupuesto 2008 permitiría digitalizar la documentación hasta 1939. Pero, claro, aun cuando el Archivo pudiera cumplir con su trabajo como se debe, si la información no se produce o no se envía para su guarda, probablemente se avance poco.

Empezar de cero

Los archivos de los ministerios y demás organismos del Estado son lugares singulares. En ellos suelen convivir funcionarios entrenados, celosos y comprometidos en la guarda de la documentación, que muchas veces se enfrentan con los funcionarios políticos de turno en pos de la conservación de ciertos documentos, y agentes estatales castigados por alguna razón y relegados a pasar sus días apilando o clasificando papeles a los que dan poca importancia.

Y a veces hay intencionalidad. "Muchísimos funcionarios se llevan la información cuando terminan su gestión porque creen que les pertenece", advierte Roberto Saba, director ejecutivo de la Asociación por los Derechos Civiles (ADC). Varios funcionarios de gestiones anteriores y actuales lo confirman en off de record , igual que dos jueces federales porteños. "Decenas de funcionarios relatan que llegan a sus oficinas al inicio de su gestión y casi no encuentran ninguna información sobre lo que se estaba haciendo hasta ese momento. Bajo esta lógica, las políticas se comienzan desde el principio una y otra vez", agrega Saba.

Los dos magistrados consultados, cuya tarea consiste básicamente en reconstruir hechos recientes de corrupción o tráfico de drogas, confirmaron que, en la práctica judicial, se advierte que muchos funcionarios se llevan los archivos -originales o, a veces, copias- sin tener mayor consciencia de que eso está prohibido. "A veces, los presentan como prueba de defensa", contó uno. Además, mencionaron casos en los que encontraron computadoras reseteadas antes de que se produjera un allanamiento en una repartición estatal o adulteraciones de documentación gracias a la tecnología.

La ignorancia también hace lo suyo. Es bien conocido que fueron pocos los archivos de la dictadura argentina que se han descubierto en el país. Uno de ellos fue el de la División de Inteligencia de la Policía de Santa Fe. ¿Qué pasó con él, en plena democracia? Cuando lo abrieron, por ley, decidieron que cada persona se llevara su legajo o el de su familiar desaparecido o asesinado. Algunos, dejaron copias. Otros, ni eso, ya que la ley no lo preveía.

Sin duda, no existe ningún rincón del mundo donde no haya secretos y todo -aun las verdades más incómodas- se haga público. El problema es que, según la mayoría de los especialistas, es poco lo que se ha hecho para avanzar en materia de registro, producción de información y archivo.

De hecho, la Ley 15.930, que crea y regula al Archivo General de la Nación, es de 1961, y los dos decretos reglamentarios de esta norma, que también están vigentes, fueron dictados durante la última dictadura militar: uno fue firmado por Jorge Rafael Videla y Albano Harguindeguy y, el más reciente, por Roberto Eduardo Viola y Tomás Liendo.

Esos decretos reglamentarios dictados durante gobiernos de facto prevén el descarte de documentos y la destrucción de archivos administrativos y documentación pública "que no merezcan ser conservados". ¿Quién decidía entonces qué se guardaba y qué no? Y ahora, ¿quién lo hace y con qué criterios? ¿Quién le indica a cada uno de los funcionarios de la Argentina qué información debe registrar o mandar al Archivo para conservar y cuál no?

Es más, ¿por qué, si pasaron casi 24 años desde la restauración democrática, nunca se dictó una nueva ley de archivos? ¿Cómo se explica que el Archivo funcione aún en la órbita del Ministerio del Interior? ¿Cómo se prevé conservar en el futuro la información que hoy el Estado genera en diversos programas informáticos que, probablemente, ya no existan cuando alguien quiera consultarlos en algunas décadas?

Una posible respuesta es que nadie -o, para ser justos, sólo unos pocos- presta verdadera atención a este asunto. Por ejemplo, el Decreto 1172/3 estableció un sistema para que todos los funcionarios de cierta jerarquía publiquen en Internet las reuniones que puedan implicar conflictos de intereses. De hecho, en www.mejordemocracia.gov.ar uno puede enterarse de con quién se reunió el Presidente hasta hace tres días atrás. Pero, claro, nunca suele haber información demasiado precisa.

Como ésta, por ejemplo: el diario El País de Madrid publicó el 25 de septiembre último que George W. Bush avisó al ex presidente José María Aznar que estaría en Bagdad en marzo de 2003 con o sin resolución de la ONU y que el jefe de Estado español le pidió apoyo en la opinión pública. La nota, que revela el contenido de una reunión que mantuvieron Bush y Aznar cuatro semanas antes de la invasión de Irak, pudo escribirse gracias a que la información de las reuniones presidenciales se publica periódicamente en los Estados Unidos.

Ratones en la historia

El director del Proyecto del Cono Sur del National Security Archives, Carlos Osorio, que colaboró y colabora con la Justicia argentina a raíz de sus hallazgos, explica cómo trabaja su organización: "Hacemos una tarea de hormiga. Seleccionamos episodios importantes de la historia y formulamos entre 500 y 1000 pedidos sobre un mismo asunto a diversas reparticiones del Estado para reconstruir lo que pasó realmente y, muchas veces, reescribir la historia". Además de averiguar sobre la Guerra de Malvinas y el Plan Cóndor, Osorio y sus compañeros trabajaron con la política de los EE.UU. con Venezuela entre 1990 y 2000, el llamado caso Irán contras y la invasión de Bahía Cochinos, entre otros episodios relevantes de la historia reciente. Los documentos obtenidos pueden consultarse en www.gwu.edu.

"Es extraordinario poder reconstruir episodios desde acá y tristísimo que no pueda hacerse desde el lugar donde ocurrieron", agrega Osorio, que prevé entre sus futuros proyectos solicitar la misma información en los EE.UU. y en la Argentina sobre las medidas que llevaron a la crisis de 2001. ¿Pasará ahora lo mismo que con las decisiones de la dictadura, volveremos a reconstruir desde allá?

En Nueva Zelanda, las cosas, desde hace un tiempo, son diferentes. En el Archivo General del país, que Oyhanarte visitó recientemente junto con el intendente de Morón, Martín Sabbatella, y otros jefes comunales, hay una bóveda similar a la del Banco Central de la República Argentina. Pero en ella, no se atesora dinero sino el Tratado de Waitangi, firmado el 6 de febrero de 1840 entre los maoríes y la Corona Británica y considerado el acta fundacional de Nueva Zelanda. El documento tiene una forma particular y sus bordes llaman la atención por lo irregulares. ¿Cuál es la explicación para ello? Que literalmente lo comieron los ratones y, sólo después de eso, las autoridades neozelandesas tomaron conciencia de que su desidia, ayudada por dientes de varios roedores, estaba comiendo su historia.

sábado, 27 de octubre de 2007

- SABAT -



Hermenegildo Sábat



Un ilustrador político y porteño





Nacido en ribereño barrio de Pocitos, R.O. del Uruguay, en 1933.

A los 28 años se casó con Blanca Rodríguez, con quien tiene dos hijos, Rafael, de 32 años, y Alfredo, de 29.

A los 15 años publicó sus primeros dibujos en el diario Acción de Montevideo. Allí aprendió el oficio de periodista: fue fotógrafo, redactor, diagramador y hasta trabajó en imprentas offset. Entre sus compañeros de trabajo estaban el escritor Juan Carlos Onetti y los políticos Zelmar Michelini y el después presidente, Dr. Julio María Sanguinetti.




Abandonó Montevideo en 1965, cuando lo nombraron secretario de Redacción de El País, ya que quería ser dibujante y no conductor de un diario (al que él mismo había ayudado a aumentar su tirada).

Al llegar a Buenos Aires estuvo ocho meses en Editorial Abril. Renunció e ingresó en la revista Primera Plana, como ilustrador. Al mismo tiempo colaboraba con la revista Crisis. Pasó a trabajar al diario La Opinión, donde renunció por ser el único dibujante. Ingresó entonces al diario Clarín, donde desde abril de 1973 ilustra las páginas de la sección Política.

En 1988 ganó el Premio María Moors Cabot que otorga la Universidad de Columbia por los dibujos hechos durante la última dictadura militar.




En San Telmo tiene la Fundación Artes Visuales, donde dicta clases de arte. Desde 1990, dirige la revista Sección Aurea.

En noviembre de 1997, se realizó en el Museo Nacional de Bellas Artes de Buenos Aires la primera exposición retrospectiva de su obra con más de 150 pinturas y 120 dibujos originales.

Desde hace muchísimos años nos deslumbra ilustrando notas en matutinos porteños.
Su extensa obra ha trascendiso el marco rioplatense y es reconocido internacionalmente.

Es algunos sectores de los Subtes de la Ciudad de Buenos Aires, hay murales con sus obras tangueras.

LIBROS PUBLICADOS

- Al troesma con cariño (1971).
- Yo Bix, Tú Bix, El Bix (1972).
- Scat (1974).
- Dogor (1979).
- Tango Mío (1981).


Ricardo A. CARRASQUET

viernes, 26 de octubre de 2007

- APATIA -



Cómo vencer la apatía ciudadana


Una de las tendencias preocupantes de la vida política y social argentina es la que nos indica que estamos asistiendo a un nuevo debilitamiento del espíritu de participación de la ciudadanía en la construcción de la democracia. Una parte significativa del cuerpo social argentino se está dejando invadir por una actitud de indiferencia o desinterés ante el destino institucional y político de la Nación.

Prueba de ese sentimiento son algunos sondeos de opinión pública que dan cuenta de un inusitado nivel de apatía ciudadana frente a los comicios presidenciales de este domingo.

Por un lado, una encuesta de la consultora Poliarquía para LA NACION, realizada una semana atrás, señala que el 73,5 por ciento de los consultados dijo prestarle poca o ninguna atención a la campaña electoral. Al mismo tiempo, el 72,8 por ciento se declaró "poco" o "nada" interesado en la política.

Otra encuesta reciente, efectuada por dos organizaciones no gubernamentales, la Asociación Civil Sumando Argentina y la Agrupación Argentina de Estudiantes para las Naciones Unidas (Aaenu), demuestra que más de la mitad de los jóvenes argentinos que votarían por primera vez manifestó indiferencia hacia el próximo acto electoral. De los principiantes en las próximas elecciones, sólo la mitad iría a votar si no fuera obligatorio y apenas el 4 por ciento dijo saber qué se elige y cuándo.

Estos datos, en particular el referido a los jóvenes, no deberían ser interpretados sólo como un llamado de atención a los candidatos y a sus equipos de campaña. Un problema que se advierte guarda vinculación con la carencia de espacios de participación reales para una juventud poco proclive a escuchar las promesas de postulantes y de gobernantes.

Una primera lectura de las conclusiones del último relevamiento puede llevarnos al facilismo de pensar que los argentinos nos encontramos ante otra muestra de una juventud anestesiada. Sin embargo, cabe tener en cuenta que desde su interesante experiencia con más de seis mil jóvenes de nivel secundario, en Sumando Argentina se enfatiza que tal percepción es falsa.

En efecto, los miles de jóvenes de 16 a 18 años que han participado del programa "Demos, Construyendo una Ciudadanía Responsable", que incentiva la participación ciudadana responsable de la juventud argentina, han desarrollado, tras haber participado en una compleja simulación de discusión de un presupuesto nacional, numerosos proyectos de mejora dentro de sus comunidades. Gestionar semáforos para su barrio, crear merenderos autosustentables, desarrollar campañas sobre el cuidado del medio ambiente, armar bibliotecas populares y liderar talleres de apoyo escolar han sido algunas de las iniciativas ideadas por esos jóvenes, estimulados por el hecho de hallar espacios en los cuales los protagonistas son ellos y en los que pueden autopercibirse como factor de cambio.

La falta de participación política no es un problema exclusivo de los jóvenes. De hecho, es un signo de toda la sociedad, que responde a múltiples razones.

Frecuentemente, se oye hablar de las cuestiones electorales como de una actividad que sólo les atañe o interesa a "los profesionales" de la política, una palabra que se utiliza todos los días, coloquialmente, con una visible intención despectiva.

Quienes alientan o emiten esa clase de juicios u opiniones incurren, de más está decirlo, en un gravísimo error. En el terreno de los principios y de la lógica que preside el desarrollo de los procesos cívicos e institucionales, nadie debe ni puede admitir -y mucho menos legitimar- la supuesta existencia de una comunidad política "profesional", integrada por quienes se dedicarían, con habitualidad, a manejar o administrar los asuntos públicos en su propio y exclusivo beneficio.

No es aceptable la existencia de una política "corporativa", desconectada de los auténticos compromisos cívicos de la República. La única política admisible es la que apunta a servir a las causas y a los objetivos generales vinculados con el bien común, en el marco de una democracia auténticamente plural y representativa.

En esa óptica, que es la única conciliable con la ética republicana y con el espíritu de nuestra Constitución histórica, todo ciudadano debe sentirse parte de una misma empresa política: la que contribuye, en todos los niveles, al engrandecimiento de la Nación.

La ciudadanía debe comprender que sin su aporte cívico constante y sin su pleno espíritu participativo nunca será posible construir las instituciones que requiere un país moderno y confiable. Cada ciudadano debe tener conciencia de que su contribución individual es una pieza clave para la edificación del sistema institucional que posibilitará el avance hacia las metas generales de progreso y bienestar con que sueña la inmensa mayoría de los argentinos.

Del mismo modo, la dirigencia política toda, y en especial quienes aspiran a ocupar los más altos cargos públicos, deberían actuar con la responsabilidad y la humildad necesarias para someter todas sus propuestas programáticas a la consideración ciudadana, sin actitudes esquivas y sin especulaciones mezquinas, como negarse a participar de un imprescindible debate por el hecho de que se cuenta con un importante aval en las encuestas de intención de voto.

Es necesario estimular el crecimiento de una cultura cívica cada vez más elevada y participativa, a fin de que las confrontaciones electorales constituyan auténticas oportunidades de superación y actualización de los grandes objetivos que aglutinan a la sociedad argentina en su conjunto.

jueves, 25 de octubre de 2007

- ALFONSINA -



Alfonsina Storni

Nació en Sala Capriasca (cantón suizo del Ticino) el 22 de mayo de 1892.
A los cuatro años se trasladó con sus padres a Argentina.
Vivió en Santa Fe, Rosario y Buenos Aires.

Alfonsina Storni está en ese intermedio epocal y estético que a veces ha querido verse como simple acotación entre dos ismos: el modernismo y la vanguardia. Pero el postmodernismo no sólo hizo fundaciones, sino que apresó, en medio de sus rechazos, mucho de lo que el modernismo daba de turbulencia creadora a la vanguardia poética. En ese plazo histórico crece cualitativa y cuantitativamente el discurso femenino con la certeza de que la mujer no sólo es guardadora, sino individuo pensante.




No es extraño entonces que la voz femenina sea tan representativa a partir de la década del 10 de nuestro siglo y que en la primera fila se destaque, como iniciadora en la poesía, Alfonsina Storni, junto a Delmira Agustini, Juana de Ibarbourou, Gabriela Mistral, Eugenia Vaz Ferreira, Dulce María Loynaz.

En medio de las tensiones comunicativas y las propias íntimas, Alfonsina debe buscar un ajuste, reacomodar la voz y colocarla enuna perspectiva del discurso. Entre esos movimientos reflexiona críticamente y se autorreflexiona como en una subjetividad escindida,es una manera de aparecer y encubrirse, de proyectar la imagen infractora y mediatizarla.

En su poesía este forcejeo se evidencia en motivos reiterados como recursos tropológicos, tras los cuales secalifica al sujeto. Estos elementos connotan el transcurrir poético, los pasos de su evolución, los tanteos del alma de aquella mujer que había llorado una lágrima cuadrada y bebido la de la madre como veneno de una ancestral resistencia ante el abuelo y el padre. Estos motivos pertenecen al mundo sensorial del cuerpo y la naturaleza.




Publicó siete libros de poemas: La inquietud del rosal (1916), El dulce diario (1918), Irremediablemente (1919), Languidez (1920), Ocre (1925), Mundo de siete pozos (1934) y Mascarilla y trébol (1938), además una Antología poética (1938) que contenía poesías inéditas y un libro de poemas en prosa, Poemas de amor (1926).

Terminó su vida suicidandose ahogada en la playa de la Perla en el mar de Plata el 25 de octubre de 1938.

Alfonsina representa, sin lugar a dudas, una mujer emblemática de nuestra poesía nacional.

miércoles, 24 de octubre de 2007

- TIEMPOS MODERNOS -


China redescubre a Marx

Esta semana, ante 2.217 delegados al 17 Congreso del Partido Comunista Chino (PCCh), el secretario general, Hu Jintao, formuló ante los representantes de los 73 millones de afiliados un balance de logros y dificultades de la segunda potencia comercial del mundo y tercera en orden de importancia en relación al producto bruto interno.


Por Jorge Castro
Diario Perfil

La economía china creció en los últimos cinco años por encima del 10% anual (11,5% en los primeros seis meses de 2007) y alcanzó un PBI de 2,7 trillones de dólares, medido según su capacidad de compra doméstica (PPP). El PBI per cápita trepó a 2.042 dólares (PPP), con un incremento de casi 20% con relación al año anterior.

Ahora el objetivo es multiplicar por cuatro en 2020 el PBI per cápita del año 2000, mientras se optimiza la estructura económica, se mejora la tasa de retorno y se reduce el consumo de recursos, a la vez que se intenta aumentar la protección del Medio Ambiente.

Cuatro son los principales desafíos que enfrenta la República Popular en esta etapa, según Hu: el crecimiento económico se realiza con un costo excesivamente alto en materia de recursos y medioambiente; se acentúa la tendencia al desequilibrio en el desarrollo de las zonas rurales y urbanas, así como de las regiones, y en general entre la economía y la sociedad. En tercer lugar, es cada vez más difícil un crecimiento sostenido de la agricultura y un incremento de los ingresos campesinos. Por último, la capacidad del Partido y del Estado para ejercer efectivamente la gobernabilidad está notoriamente en retraso frente a la nueva situación.





Hu Jintao sostuvo la necesidad de que el Partido desarrolle una “visión estratégica” centrada en la globalización de la economía mundial, y teóricamente fundada en el pensamiento de Marx. Su propuesta es una innovación radical en la historia ideológica de la revolución china. Tanto para el Partido Comunista como para el Kuomintang, el núcleo de la ideología revolucionaria desde su lanzamiento por Sun Yat-sen (1912) es el nacionalismo, en su triple significado de independencia, integridad territorial y soberanía nacional.

La modernización le fue impuesta a China por el Occidente industrializado y capitalista. Por eso, su historia desde 1840 (“Guerra del Opio”, pérdida de Hong Kong) hasta 1949, al menos, es la de la sujeción y la resistencia a los poderes extranjeros. El mundo para Mao Tse Tung y su generación, que incluye a Deng Xiaoping, quien lanzó las reformas y el proceso de apertura en 1978, era un sistema de Estados-naciones, en el que el objetivo chino era terminar con la “humillación” impuesta por los poderes extranjeros y lograr para la República Popular una posición internacional justa y legítima. Pero a partir del cisma chino-soviético y la guerra fronteriza entre las dos potencias “socialistas” (1960-69), y sobre todo durante los diez años de “Revolución Cultural” (1966-76), China se separó del sistema internacional y se sumergió en sí misma, en una política de autarquía en lo económico y de aislamiento en lo internacional.

Esta doble política coincidió con el colapso político, económico e institucional de la “Revolución Cultural”, y fue revertida a partir de 1978, dos años de la muerte de Mao, con el liderazgo de Deng Xiaoping. El mundo se convirtió en “global” en los últimos cinco años. En un sentido estricto, la globalización como hecho central de la época se convirtió en el eje de la visión estratégica china a partir de 1997 (crisis financiera internacional desatada en Asia y devolución de Hong Kong).




Allí termina, en la perspectiva china, el mundo como sistema de Estados-naciones, y emerge la transnacionalización como rasgo fundamental del sistema internacional, en la doble dimensión del carácter prioritario de las empresas transnacionales y de la desterritorialización del poder mundial. Las sucesivas visiones estratégicas del Partido Comunista chino no son resultado de diferentes interpretaciones de los textos canónicos del marxismo, sino consecuencia del cambio de las condiciones históricas. La propuesta de Mao sobre la “guerra prolongada” enseñada en las cuevas de Yenán, y las lecturas de Althusser en la margen izquierda del Sena, no son distintas exégesis de los textos de Marx, sino situaciones históricas radicalmente intransferibles.

El Partido Comunista chino se centra ahora en el concepto de la globalización, y redescubre al marxismo, mientras deja atrás el núcleo central de su trayectoria ideológica de 86 años, el nacionalismo, mediado por el legado de la Tercera Internacional y el leninismo: “La organización es poder”.

lunes, 22 de octubre de 2007

- TCHAIKOVSKY -







Piotr Ilich Tchaikovsky

Importante compositor ruso


Si no han oído hablar de Tchaikovsky seguro han oído hablar del ballet el Cascanueces que se representa todos los años en Caracas en el Teatro Teresa Carreño con el Ballet Nacional de Caracas del Teatro Teresa Carreño y la Orquesta Sinfónica de Venezuela. La música de ese ballet fue compuesta por Piotr Ilich Tchaikovsky, compositor ruso del siglo XIX.

Nació en la ciudad de Votkinsk el 7 de mayo de 1840 en una familia de buena posición económica. Comienza sus estudios de piano a la edad de 7 años como parte de la educación que toda familia acomodada daba a sus hijos pero sin ninguna pretensión de que Piotr siguiera esta carrera por lo que es enviado a San Petersburgo a estudiar en la Escuela de Jurisprudencia de la cual se gradúa de abogado en 1859.





Trabaja como abogado por un tiempo pero su verdadero deseo era dedicarse profesionalmente a la música así que en 1862 se inscribe en el recién inaugurado Conservatorio de San Petersburgo dejando el trabajo de abogado y debiendo subsistir gracias a las clases de solfeo y piano que dictaba.

Se gradúa como compositor en 1865 y sus composiciones comienzan a ser tocadas en publico y a recibir cierto reconocimiento pero es en 1876 cuando “conoce” a la señora Nadiezhda von Meck que comienzan los mejores años de la vida del compositor. La señora von Meck era una viuda muy rica y amante de la buena música que después de asistir a un concierto donde se tocaba una de las obras de Tchaikovsky y luego de enterarse de sus dificultades económicas decidió ayudar al compositor proporcionándole dinero suficiente como para que se dedicara a solo a componer, pero lo curioso de la relación es que aunque mantuvieron una larga correspondencia nunca se vieron en persona.



La fama de Tchikovsky aumentó tanto que llego a ser invitado a distintos países como Estados Unidos, Francia e Inglaterra. Pero en 1890 ocurrió lo que Tchaikovsky pensó nunca iba a ocurrir y fue que la señora von Meck, la que él consideraba su única amiga, alegando problemas financieros dejó de ser su mecenas. Las causas no están muy claras pero se dice que se enteró de la homosexualidad del compositor que era un secreto a voces a pesar de que se había casado con una mujer de la que se divorció poco tiempo después justamente para disimular sus inclinaciones en una sociedad poco abierta a este tipo de gustos.




En 1993 muere siendo una gran pérdida para su país natal, Rusia, como para el mundo de la música, pero aún es recordado a través de sus composiciones tales como los ballets El Cascanueces y el Lago de los cisnes, sus sinfonías y obras como Romeo y Julieta o la Obertura 1812.

domingo, 21 de octubre de 2007

- OCTUBRE -




Octubre rojo:


bajo el signo de la revolución





El paradigma de la Guerra Fría, marcó a fuego la vida de varias generaciones y produjo fracturas políticas y culturales que aún hoy, casi cien años después, siguen generando discusión



Por Graciela Zubelzú

La Nación - Opinión
Foto: Arte de tapa: Mariana Trigo Viera



Retroceder en el tiempo para evocar los 90 años de la Revolución Rusa, en un momento en que Rusia está cada vez más integrada al sistema capitalista internacional, es contraponer el presente al origen de un proceso que planteaba un destino antitético al actual.

Los acontecimientos de octubre de 1917 remiten a fuerzas rusas profundas y a un proyecto ideológico que buscaba ser universal. Del encuentro entre ambos surgió un proceso inédito que modificaría el curso del siglo XX.

¿Por qué maduró en 1917 la revolución? Los tiempos prerrevolucionarios ofrecen algunas claves: un devenir recurrente de rebelión, malestar, decisiones políticas erradas, en lo doméstico, y también opciones nefastas en la política internacional imperial.

Los avances del zar Alejandro II hacia una Rusia más moderna condujeron a la liberalización de los siervos y a la adopción de reformas judiciales que, en 1864, aproximaban el imperio a otras monarquías europeas. Pero esos avances quedaron truncos. Ante el atentado terrorista que le costó la vida a su padre, el zar Alejandro III sepultó los proyectos de una limitada apertura política que incluía la adopción de una Constitución, fortaleció la autocracia y acentuó el ritmo de la industrialización rusa. Como sucedería con Stalin poco más de medio siglo después, la industrialización se impulsaría sin importar los costos. La combinación de férreo autoritarismo y modernización sobrevivió por algunas décadas alimentando y acumulando contradicciones. Pero, ¿por cuánto tiempo se podía intentar compatibilizar lo antagónico?

El último zar, Nicolás II, profundizó estas tensiones con su visión de Rusia y de su propio rol. Su adhesión al tradicionalismo, a la esencia autocrática de la monarquía y a la identificación del campesinado con "el ser genuinamente ruso" -que encarnaba valores como el trabajo duro, la resignación y la fe religiosa- inhibía su comprensión de los importantes cambios que se desarrollaban en el imperio.

En momentos de la asunción de Nicolás II, la Rusia de fin del siglo XIX sufría el impacto de un proceso social profundo: la desarticulación del antiguo sistema de producción rural representado por el desplazamiento creciente de la aldea por parte de las ciudades. Como sostiene Orlando Figes, en las últimas décadas del siglo XIX la comuna campesina ya no alimentaba a la creciente población rural, ni aportaba un excedente comercializable al que el Estado pudiera cobrarle impuestos. En consecuencia, a medida que se profundizaba la crisis agraria, ésta se convertía en el núcleo organizador de la revolución campesina.

Así, los estallidos de múltiples conflictos confluyeron en 1905. A la primera protesta pacífica de obreros y campesinos que reclamaban al zar mejoras laborales le siguió una feroz represión que dejó numerosas víctimas en la jornada conocida como el Domingo Sangriento. A partir de entonces, el tiempo histórico se aceleró. Las fuerzas sociales, que reclamaban un cambio profundo impulsando movilizaciones, huelgas y motines eran tan heterogéneas como lo eran sus reclamos: los obreros de las fábricas de San Petersburgo y de los ferrocarriles demandaban mejores condiciones de trabajo; los campesinos, ayuda para poder sobrevivir ante la escasez de tierras; los liberales buscaban cambios políticos, y las minorías no eslavas, mayores derechos.

Sólo bajo una extrema presión, el zar aceptó las innovaciones políticas -en las que no creía- que desembocarían en el Manifiesto del 17 de octubre de 1905: derechos civiles, legalización de los partidos políticos, sufragio universal y el establecimiento de la Duma como órgano legislativo central. Pero los cambios -incluida la Constitución de 1906- resultaron insuficientes y la ebullición rusa se potenció con la política internacional impulsada por el zar. Los costos humanos y la derrota militar en la guerra ruso-japonesa que finalizó en febrero de 1905 generaron motines y levantamientos en otros sectores sociales y expandieron la insurrección a Vladivostok, Sebastopol y Kornstadt. Tras el boicot de los bolcheviques en las elecciones a la primera Duma y las agitaciones posteriores, el zar disolvió en 1906 la institución legislativa en la que nunca había creído.

El germen de 1917

¿Fue aquélla una revolución inconclusa? ¿Resultaron los acontecimientos comprendidos entre febrero y octubre de 1917 la culminación del proceso iniciado en 1905, que sobrevivió con menor voltaje y de nuevo se aceleró en aquellos pocos meses? Hay un paralelismo interesante entre estos sucesos y los de fines del siglo XX, cuando también en unos pocos meses, pero de 1991, la URSS se diluyó como antes se había diluido el imperio.

Pese al retroceso, los avances de 1905 lograron dejar su huella en la Rusia imperial. Antes de esa fecha, la tasa de analfabetismo de la población rural adulta era del 75 por ciento mientras que, hacia 1914, se habían creado unas 50.000 escuelas -con tres millones de estudiantes y unos 80.000 maestros-, y once universidades con 40.000 estudiantes.

Estos logros en la instrucción pública, sumados al malestar creciente y al descontento político que encontraba también en la aristocracia una buena caja de resonancia, estimularon una mayor toma de conciencia acerca del anacrónico y represivo sistema imperial. Por eso es que la revolución de febrero de 1917 -que llevó a la abdicación del zar y a la creación de un gobierno provisional- tuvo el respaldo de un conjunto variado de grupos sociales y políticos. Sin embargo, aunque se concretó la elección de una Asamblea Constituyente, la lentitud del proceso de reformas y la decisión de mantener a Rusia en la Primera Guerra Mundial acentuaron su impopularidad.

Por otra parte, en la medida en que los socialistas lograron capitalizar ese descontento y extender a otras ciudades rusas sus organizaciones populares, los soviets, la balanza del poder pronto quedó inclinada y el regreso de Lenin desde el exilio terminó por definir la ecuación. Su herramienta para alcanzar y conservar el poder fue el partido bolchevique. En aquellos meses decisivos, Lenin lideró entonces una revolución que logró ser encauzada y concluida. Para ello revirtió rápidamente dos decisiones clave que había tomado el gobierno provisional: suscribió el tratado de Brest-Litovsk que detuvo la invasión alemana a costa de la pérdida de territorios y disolvió la Asamblea Constituyente, con lo cual eliminó de la vida política una Constitución que fuera producto de los diversos matices ideológicos presentes en aquella asamblea. Para fortalecer aún más su propia autoridad, socavó el poder de los soviets debilitando su poder horizontal y de fuerte impronta deliberativa para reemplazarlo por el manejo jerárquico y profesional del Partido Comunista. Hélène Carrère d Encausse se ocupó de destacar en su biorgrafía de Lenin la perdurabilidad del sistema totalitario que el líder bolchevique había construido en los escasos cuatro años que detentó el poder.

Pero la temprana muerte de Lenin en 1924 dejaría a los bolcheviques y a toda Rusia en manos de Stalin, con quien la profundización de la represión interna adquiriría dimensiones nunca antes vistas: purgas en el partido, juicios falsos y sumarios, hambrunas, deportaciones de grupos étnicos, encierros en los gulags y las internaciones en instalaciones psiquiátricas fueron constantes en un país paralizado por un terror que ni siquiera se detuvo en las fronteras soviéticas y alcanzaron a Trotsky en el exilio.

¿Pudo haber sido diferente la revolución sin la figura de Stalin? ¿Hubiera sido Lenin un conductor menos sangriento? Las preguntas contrafácticas no siempre son productivas, pero en este caso ayudan a centrar la reflexión en la génesis del proceso y en cómo en esa génesis está su rasgo constitutivo. La revolución se impuso violentamente -no decía Marx que "la violencia es la partera de la historia"- suprimiendo toda disidencia. En ese sentido, Stalin fue la consecuencia de Lenin.

Discrepancias ideológicas

Con todo, los postulados del nuevo modelo soviético -el proletariado, el partido monopólico y vanguardista, la propiedad estatal de los medios de producción y la colectivización de la tierra agrícola- eran motivo de discusión también dentro de la propia cúpula bolchevique en donde había profundas discrepancias sobre cómo continuar la revolución. Ideólogos, cuadros políticos y también filósofos, historiadores y politicólogos debatieron ferozmente sobre las contradicciones y diferencias entre los postulados revolucionarios teóricos y la revolución real, la consolidación del proletariado y la siempre lejana sociedad sin clases, la revolución permanente versus la revolución por etapas, la necesidad del Estado y el postulado de la abolición del Estado.

Mientras tanto, el mundo asistía con enorme temor a la indefinición de si la revolución soviética intentaría tener alcance universal u optaría por consolidarse en la URSS. Por otra parte, luego de un período de repliegue, el país retornaba victorioso al escenario mundial tras la Segunda Guerra Mundial, convertido en el dueño del destino de media Europa. Poco después alcanzaba el status de una superpotencia nuclear, coprotagonista entre 1947 y 1989-1991 de la Guerra Fría.

Pero el impacto del proceso revolucionario resultó aún más vasto. Además de moldear el sistema internacional al haber dado nacimiento a la superpotencia soviética -calificada como pragmática y conservadora por numerosos marxistas- la Revolución de Octubre fue entendida como un modelo por imitar para muchas naciones y pueblos que buscaban romper con pasados de opresión o colonialismo en lugares muy diversos del mundo. Sin embargo, en su nuevo rol internacional, la URSS mostró una conducta ambigua y cínica: alentó selectivamente la exportación de la revolución sobre la base de un pragmatismo categórico y suprimió movimientos aperturistas en su esfera de influencia como la primavera de Praga.

La apertura

Lo cierto es que, en poco más de un siglo, la historia rusa ha visto nacer y morir buena parte de sus instituciones fundamentales. La Perestroika impulsada por Mikhail Gorbachov a mediados de la década del 80 -que tuvo su antecedente en el célebre discurso de Nikita Krushev en el Vigésimo Congreso del Partido Comunista- inició un proceso de autocrítica y apertura que culminó en 1989 con la caída del Muro de Berlín. Desde 1991, la Rusia independiente, inició de modo brutal la transformación hacia una economía capitalista y un sistema político más abierto en la que la revitalizada Iglesia Ortodoxa constituye una institución socialmente valorada.

La historia rusa parece sugerir que en ese país los procesos de cambio no operan de modo gradual. Hay numerosos ejemplos de innovaciones impuestas de modo tajante y con altísimos costos y rebeliones que se suceden como borbotones teñidas de rojo. La revolución de 1917 no escapó a esa dinámica tan rusa.

Tampoco el ingreso al capitalismo globalizado fue gradual. Transformada ahora en un mercado emergente muy atractivo para la economía mundial transnacionalizada, Rusia ha vuelto a convertirse en una sociedad de clases con notorias asimetrías de ingresos (muchos se preguntan cómo hará una sociedad que aprendió a valorar la equidad para superar la vulnerabilidad social producida por la abrupta adopción del capitalismo salvaje) y con una democracia acosada por la corrupción y cierta tendencia al centralismo político.

Sin embargo, las dificultades aún no resueltas no deberían hacernos perder de vista que, a 90 años del inicio de la revolución que cambió todo un siglo, el pueblo ruso ha logrado construir un presente pacífico sin guerras, ni purgas, ni gulags. No es poco después de tanta muerte.

Doctora en Relaciones Internacionales. Investigadora del CONICET y docente en la Universidad Nacional de Rosario

sábado, 20 de octubre de 2007

- ARGENTA -













ARGENTINOS

Como testimonio del conflictivo camino en la construcción de nuestra identidad y el deseo de vincularnos con algo firme, inmutable, esencial y a prueba de vaivenes políticos. Queremos que siempre fuimos "Argentinos".

"Argentina" fue sólo un nombre poético, deriva del latín argentum (plata). Lo llevó a la fama un soldado poeta, Martín del Barco Centenera, quien anunció la composición de "La Argentina", un largo poema en el que narraba la conquista del Río de la Plata. El nombre circuló con suerte variada hasta principios del siglo XIX.

Por entonces poetas neoclásicos y patriotas, popularizaron el adjetivo de sabor latino y desde entonces, fue nombre corriente para periódicos: "La Prensa Argentina", "El Triunfo Argentino"… El nombre estaba en el ambiente, muchos lo usaban. ¿Pero a quiénes designaba?. Se referiría, a los hijos de Buenos Aires, a quienes quizá se llamara "hijos de la Patria", "patricios" o "patriotas".

Creímos que la Nación Argentina, siempre existió, pero fueron pasos trabajosos para llegar a un final predeterminado. En 1810 fuimos las Provincias del Río de la Plata, y desde 1811 Provincias Unidas del Río de la Plata.

En 1816, quizá por la renacida esperanza que insuflaba San Martín, se declaró la independencia de las Provincias Unidas de Sudamérica. Luego de la crisis de 1820, el Congreso de 1824 volvió a las Provincias Unidas del Río de la Plata. Mientras tanto, el más poético "Argentina" seguía abriéndose camino y penetrando en el vocabulario político institucional. La Asamblea del año XIII aprobó el Himno Nacional, que proclamaba "Al gran pueblo argentino salud".

En 1826 el Congreso de las Provincias Unidas creó el cargo de Presidente de la República Argentina, y después sancionó la Constitución de la República Argentina. Cierto que duró poco, pero desde entonces quedó incorporado al nombre de la comunidad política que se iba gestando. Hubo una "Federación Argentina" y una "Confederación Argentina", y éste fue el nombre que adoptó la Constitución de 1853.

En 1860 se reformó la misma y se adoptó ya definitivamente, el de: "REPUBLICA ARGENTINA".Así nos llamamos desde entonces. Corrientemente solemos decir "La (República) Argentina"; sin omitir el artículo, pues como lo escribió Del Barco Centenera, se trata de un adjetivo, que alude a un siempre prometido futuro de abundancia.

viernes, 19 de octubre de 2007

- BORENBOIM -



Daniel Barenboim


Un personaje en el arte de la música
con temperamento y visión universal



Daniel Barenboim nece en Buenos Aires, un 15 de noviembre de 1942.
Músico argentino de familia judía de origen ruso, nacionalizado israelí y español. Barenboim logró la fama como pianista aunque con posterioridad ha obtenido gran reconocimiento como director de orquesta, faceta por la que es más conocido. En el año 2001 protagonizó la polémica dirección de una obra del alemán Richard Wagner en Israel.

Barenboim comenzó sus lecciones de piano a la edad de cinco años con su madre, continuándolas después con su padre que quedó como su único profesor. En agosto de 1950, con tan sólo 7 años, interpretó su primer concierto en Buenos Aires.

En 1952, la familia Barenboim se trasladó a Israel. Dos años más tarde, sus padres le enviaron a Salzburgo para que tomara clases de dirección con Ígor Markevich. Durante aquel verano conoció a Wilhelm Furtwängler para quien tocó el piano. Además. Furtwaengler hizo excepcionales elogios sobre el joven pianista que no eran sino la reciprocidad de la admiración que Barenboim le mantiene hasta hoy, jamás imitándolo pero sí aceptando su inspiración, que se trasunta en sus versiones de las sinfonías de Beethoven, en ningún momento copias al calco como las lamentables de un famoso director italiano que no es propio nombrar. En 1955 estudió armonía y composición con Nadia Boulanger en París.

El debut de Barenboim al piano se produjo en el Mozarteum de Salzburgo, Austria 1 en 1952, en París ese mismo año, en Londres en 1956 y en Nueva York en 1957 bajo la batuta de Leopold Stokowski. En los años siguientes se sucedieron regularmente los conciertos por Europa, Estados Unidos, Sudamérica y el Lejano Oriente.
Su primera grabación data de 1954. Más tarde grabraría las sonatas para piano de Mozart y Beethoven y conciertos de Mozart (interpretando al piano y dirigiendo), Beethoven (con Otto Klemperer), Brahms (con John Barbirolli) y Béla Bartók (con Pierre Boulez).



Tras su debut como director con la Orquesta Filarmónica de Londres en 1967, recibió invitaciones de numerosas orquestas sinfónicas europeas y americanas. Entre 1975 y 1989 fue director musical de la Orquesta de París donde dirigió numerosas piezas de música contemporánea.

Su debut como director de ópera tuvo lugar en 1973 con la representación del Don Giovanni de Mozart en el Festival de Edimburgo. En 1981 debutó en Bayreuth, donde dirigió con regularidad hasta 1999.

Barenboim es el director musical de la Orquesta Sinfónica de Chicago, cargo al que accedió en 1991 en sustitución de Georg Solti. Es además el director musical general de la Deutsche Staatsoper de Berlín desde 1992.

Además de sus actividades como pianista y director de orquesta, Barenboim ha compuesto varios tangos.
Barenboim contrajo matrimonio con la notable chelista británica Jacqueline du Pré, cuya carrera se vio trágicamente truncada por una esclerosis múltiple.

Wagner en Israel

Realmente Inédito


El 7 de julio de 2001, Barenboim dirigió la Staatskapelle de Berlín en la representación de la ópera de Wagner Tristán e Isolda en el festival de Israel celebrado en Jerusalén. El concierto estalló en griterío, siendo Barenboim tildado de pro-nazi y fascista por algunos de los presentes. La música de Wagner ha sido tabú en Israel por las teorías de Adolf Hitler sobre la pureza racial y la exterminación de los judíos alimentadas en parte por los escritos antisemitas de Wagner, su compositor favorito. En la Alemania nazi, su música fue utilizada para la propaganda nazi, e interpretada en los campos de concentración.

Barenboim iba a interpretar en un principio el primer acto de La Walkiria con tres cantantes, entre los que se encontraba el tenor español Plácido Domingo. Sin embargo, las protestas de los supervivientes del holocausto y del gobierno israelí forzaron a la organización del festival a buscar un programa alternativo. Barenboim accedió a sustituir la pieza "ofensiva" por composiciones de Schumann y Stravinski, aunque no sin mostrar su desacuerdo con la decisión. Así, finalizado el concierto, declaró que en el bis iba a interpretar una pieza de Wagner, invitando a aquellos de los presentes que tuvieran alguna objeción a abandonar la sala.



Ensayo de la orquesta del Diván Este-Oeste 2005. Bajo la dirección de Daniel Barenboim, se ensaya la Primera sinfonía, «Titán» de Gustav Mahler (4º movimiento, Stürmisch bewegt). Pilas (Sevilla), 25 de julio de 2005.

La mayoría del auditorio respondió con una ovación, pero una minoría expresó su desaprobación. Barenboim estuvo media hora explicando en hebreo a la audiencia sus razones para interpretar la pieza y solicitando a los que protestaban que permitieran que la música se pudiera escuchar. Barenboim dijo que había decidido desafiar el tabú cuando en una conferencia de prensa a la que había asistido la semana anterior había escuchado un teléfono móvil con la melodía principal de La cabalgata de las walkirias, de Wagner: "Si está permitido escucharla en el timbre de un teléfono, ¿por qué no podemos intepretarla en una sala de conciertos?".

La West-East Divan Orchestra

En 1999, junto con el escritor estadounidense de origen palestino Edward Said, al que le unió una gran amistad, fundó la West-East Divan Orchestra, una iniciativa para reunir cada verano un grupo de jóvenes con talento de Israel y países árabes. Por ello, recibieron ambos el Premio Príncipe de Asturias en 2002.



En 2004 le fue concedido el Premio de la Fundación Wolf de las Artes de Jerusalén.

El año pasado la Televisión Europea registró en vivo un concierto en nuestra Av. 9 de Julio que se emitió al viejo mundo, interpretando tangos y repertorio clásico.

Un personaje muy interesante, además de sus dones de músico, compositor, director y arreglador.

jueves, 18 de octubre de 2007

- PAIS -








Chicos malos


“¡Que se vayan todos! fue la consigna más revulsiva y anárquica de la que, desde el Mayo Francés, tengamos memoria”, dice el prólogo de la reedición argentina del libro El anarquismo, de Daniel Guèrin, uno de los mayores pensadores revolucionarios de la Francia del siglo XX.

Por Jorge Fontevecchia
Diario Paerfil


BARRA BRAVA POLITICA

Esa es la mirada que la clase media tiene de Quebracho, la más rebelde y combativa organización de base del país

“¡Que se vayan todos! fue la consigna más revulsiva y anárquica de la que, desde el Mayo Francés, tengamos memoria”, dice el prólogo de la reedición argentina del libro El anarquismo, de Daniel Guèrin, uno de los mayores pensadores revolucionarios de la Francia del siglo XX.

Pocas veces tanta gente, sin saberlo ni proponérselo, adhirió a consignas anarquistas como el 19 y 20 de diciembre de 2001 las señoras que hicieron sonar sus cacerolas.
La misma inconsciencia de su trascendencia histórica la tuvo otra señora que en 1991 decidió acampar durante 81 días frente a Tribunales reclamando la actualización de su jubilación. Norma Plá, a pesar de su edad (murió cinco años después), supo sacar fuerzas para trepar las columnas del Congreso, pasar por sobre policías y tomar varias veces el edificio del PAMI. Aterrorizó a Menem, hizo llorar a Cavallo y sentó las bases del primer foco de la resistencia antinoventista que luego emergería, y de la que germinaron movimientos como Quebracho (su líder, Fernando Esteche, cuenta en el reportaje de página 18 que sus orígenes fueron con Norma Plá) o los primeros piqueteros, como el hoy endulzado Raúl Castells.

A lo largo de la década, el movimiento antinoventista fue creciendo para convertirse en 2001 –potenciado por la caída de la Convertibilidad– en una bola de nieve que se llevaba puesta a toda la dirigencia política argentina.

Kirchner, como Menem, asumió después de una enorme crisis. Por eso hay muchos paralelismos entre ellos. Lo mismo sucede con sus dos predecesores, Alfonsín y Duhalde, quienes tuvieron que adelantar la entrega del Gobierno porque los empujaba la crisis económica, pero también la insurrección de un sector de la sociedad: a Alfonsín los militares y a Duhalde los movimientos populares de base.

Sus sucesores –Menem y Kirchner– también llegaron marcados por esos conflictos y sus políticas son hijas de esa problemática que precisaban resolver.
Para recuperar la gobernabilidad ambos hicieron lo mismo: mimetizarse con el discurso de la amenaza y cooptar a la mayor cantidad de esos activistas.
Muy simplificadamente, Menem “se disfrazó de militar”: nombró en el Gobierno a Alsogaray, implantó una economía conservadora y dispuso indultos y todo tipo de perdones a los genocidas de la dictadura.

Muy simplificadamente, Kirchner “se disfrazó de antinoventista”: nombró en su gobierno a piqueteros y políticos críticos de los 90 aunque no provinieran de su propio partido, como aristas y frepasistas (por el opuesto: lo que hizo Menem con la UCeDé), implantó una economía dirigista y derogó todo indulto o perdón a los genocidas de la dictadura.

Si se trascienden las enormes diferencias, tanto de forma como de fondo, y se hacen esfuerzos por concentrar la vista sólo en la estructura de ambas situaciones, se percibirá que los presidentes asumieron débiles, condicionados por los factores de poder que habían consumido a cada uno de sus predecesores, y fueron muy exitosos en reconstruir poder presidencial y gobernabilidad usando, como en el judo, la fuerza del adversario, a quien absorbieron (lo que Sum-Tzu recomendaba En el arte de la guerra: “conservar intacto al enemigo” engrosando las propias filas).

Ni Menem era genuinamente un conservador, sino más bien todo lo contrario, un estrafalario transgresor de toda norma; ni Kirchner era un heterodoxo con el dinero ni un romántico guerrillero, sino más bien todo lo contrario, el más conservador financista público del que se haya tenido memoria, que no gastó los fondos de su provincia sino los envió al exterior (encima en los bancos que tanto tuvo que criticar) y fue también uno de los menos parecidos al romántico guerrillero guevarista de los ‘70. Pero el imperio de la realidad obligó a los dos presidentes a ajustarse al único papel que podían representar con éxito.

En el citado reportaje al líder de Quebracho, Esteche sostiene que ni Alfonsín juzgó a la juntas de comandantes, ni Kirchner derogó las leyes de Obediencia Debida y Punto Final, sino que cualquiera que le hubiese tocado gobernar en ese momento tendría que haberlo hecho porque la presión social en ese sentido era irrefrenable. Continuando con las comparaciones entre Kirchner y Menem, Quebracho fue lo que el Presidente no quiso, no pudo o no debió cooptar.

Y Seineldín fue el carapintada que Menem no quiso, no pudo o no debió cooptar. Ambos, Quebracho y Seineldín, quedaron como enemigos acérrimos del Gobierno demostrando que no hay peor astilla que la del mismo palo. Seineldín no demandaba indultos ni perdones sino reconocimiento a la heroica gesta militar, por lo menos en Malvinas y Nicaragua. Quebracho tampoco se conforma con el descenso del desempleo y un discurso anti FMI, y desea una alianza más estrecha con los adversarios del imperialismo, Chávez e inclusive Irán.

Quebracho y Seineldín, salvando las distancias, son dos excesos sobre el discurso dominante de una época, que luego pueden sonar patéticos o arcaicos pero son el mejor exponente arqueológico de lo que era la Argentina de 2001 y de 1989.
Si la economía Argentina continúa creciendo, quizá dentro de algunos años palabras como Quebracho o piqueteros queden en el olvido, como carapintadas se quedó para siempre en los 90.

miércoles, 17 de octubre de 2007

- TANGO -




EL TANGO

El tango es un estilo musical y una danza rioplatense, propia de las ciudades de Buenos Aires, Montevideo y Rosario, de naturaleza netamente urbana y renombre internacional. Musicalmente tiene forma binaria y compás de cuatro por ocho, es clásicamente interpretado mediante orquesta típica o sexteto y reconoce al bandoneón como su instrumento esencial.

La coreografía, diseñada a partir del abrazo de la pareja, es sumamente sensual y compleja. Las letras están compuestas con base a un argot local llamado lunfardo y suelen expresar las tristezas, especialmente «en las cosas del amor»1 , que sienten el hombre y la mujer de pueblo, circunstancia que lo emparenta con el blues. Enrique Santos Discépolo, uno de sus máximos poetas, definió al tango como «un pensamiento triste que se baila»

Orígenes culturales: arte urbano de fusión

Si bien el tango reconoce lejanos antecedentes africanos, latinoamericanos y europeos, sus orígenes culturales se han fusionado de tal modo que resulta casi imposible reconocerlos. En esencia el tango es una expresión artística de fusión, de naturaleza netamente urbana, que responde al proceso histórico concreto de la inmigración masiva, mayoritariamente europea, que reconstituyó completamente las sociedades rioplatenses, especialmente las de Buenos Aires, Rosario y Montevideo, a partir de las últimas décadas del siglo XIX.




Argentina, que en 1850 contaba con 1,1 millón de habitantes, recibió 6,6 millones de inmigrantes entre 1857 y 1940. Uruguay sufrió un proceso similar. Se trata de una experiencia humana «aluvial»3 , casi sin parangón en la historia contemporánea.
A diferencia de otras zonas del mundo, los inmigrantes que llegaron al Río de la Plata a partir de la segunda mitad del siglo XIX, superaban en cantidad a las poblaciones nativas y fueron parte de un intensivo proceso de mestizaje multicultural y multiétnico, en gran medida inducido por el Estado a través de una formidable promoción de la escuela pública laica.

El tango es hijo directo de ese intenso mestizaje. Se sabe que los primeros tangueros eran afroargentinos y afrouruguayos4 ; que el bandoneón proviene de Alemania; que su sensualidad deriva de su origen prostibulario, donde los inmigrantes europeos que llegaban solos a buscar empleo mantenían relaciones sexuales con las nativas, mayoritariamente afroargentinas e indoamericanas denominadas «chinas».

Se sabe también que el argot del tango, el lunfardo, está plagado de expresiones italianas y africanas; que su ritmo y clima nostálgico está emparentado con la habanera cubana; y que «tango, milonga, malambo y candombe», son parte de una misma familia musical de raices africanas y costumbres proveniente de los gauchos que migraron a la ciudad.




Sin embargo el tango no se confunde ni deriva de ningún estilo musical en particular. Ernesto Sábato dice que por sobre todas las cosas el tango es un híbrido, una expresión original y nueva que deriva de una movilización humana gigantesca y excepcional.

Seguramente una buena definición fue la de Borges:

“El tango puede discutirse, y lo discutimos, pero encierra, como todo lo verdadero, un secreto. Los diccionarios musicales registran, por todos aprobada, su breve y suficiente definición; esta definición es elemental y no promete dificultades, pero el compositor francés o español que, confiado en ella, urde correctamente un “tango”, descubre, no sin estupor, que ha urdido algo que nuestros oídos no reconocen, que nuestra memoria no hospeda y que nuestro cuerpo rechaza. Diríase que sin atardeceres y noches de Buenos Aires no puede hacerse un tango y que en el cielo nos espera a los argentinos la idea platónica del tango, su forma universal…, y que esa especie venturosa tiene, aunque humilde, su lugar en el universo.”

Jorge Luis Borges “ Evaristo Carrriego”

martes, 16 de octubre de 2007

- LOS BLOGS -



Ciber protesta: usuarios, quejas y blogs

Cada vez más la queja y la bronca de consumidores que se sienten atropellados en sus derechos encuentran en los blogs los canales de desahogo que las empresas de servicios públicos o el Estado no siempre ofrec

Enfoques - La Nación
Por Francisco Seminario
Fotoilustración: Mariana Trigo Viera



Es posible que poco le importe a un desventurado usuario del ferrocarril Roca lo que pueda ocurrir con el servicio de telefonía celular en el norte del Conurbano, así como es probable que a un pasajero del Mitre le preocupen poco los padecimientos de un usuario de Telefónica en el sur del país o que a quien no le gusta la ensalada de tomates le despierte escaso interés el boicot nacional que esta semana debió sufrir tan inofensivo fruto.

Pero en la Argentina de la inflación encubierta y el "vale (casi) todo" de los servicios públicos, un hilo invisible parece unir a unos y otros en el ciberespacio, donde cada vez más las quejas y la bronca de consumidores que se sienten atropellados en sus derechos encuentran la válvula de escape que no siempre les ofrecen las empresas o las asociaciones de defensa del consumidor: en los últimos tiempos, los blogs de usuarios enojados, frustrados o simplemente preocupados por la calidad y el precio de los servicios y productos que consumen de manera cotidiana se han multiplicado como hongos (venenosos, algunos) en Internet. Hacia allí parece haber migrado una parte de la protesta ciudadana, posiblemente ganada por el escepticismo que despiertan los libros de quejas, espantada por los laberintos de la burocracia o atraída por la inmediatez que ofrece la Red. Y en el código desprejuiciado del blogger argentino promedio, esta queja asume características particulares, llamativas -y acusatorias- desde el momento mismo en que la navegación nos deposita en alguna de estas bitácoras online.

Los nombres de algunos de estos blogs son en sí mismos elocuentes: comovacas.blogspot.com , viajecomoelorto.blogspot.com , mecagoenmetrovias.wordpress.com , estafadosportelefonica.blogspot.com ; speedyapesta.com.ar ... hay muchos más, y permanentemente aparecen nuevos.

El propósito evidente de estos blogs es llamar la atención sobre alguna problemática convocante. Son espacios que alertan sobre derechos presuntamente vulnerados e invitan a una suerte de catarsis colectiva: nacidos al margen de las asociaciones de defensa de los consumidores, no asumen la representación de nadie ni pretenden erigirse en árbitros entre empresas y usuarios, pero en su mayoría recogen quejas e inquietudes, ofrecen consejos y sugerencias y proponen soluciones en relación con sectores específicos, todos de fuerte impacto en la vida diaria de millones de personas: el transporte en la ciudad -tema favorito-, la telefonía celular, el acceso a Internet... y también, por qué no, el precio del tomate.

Por lo pronto, las organizaciones de consumidores ven el fenómeno con sumo interés, atentas a que el surgimiento de nuevos espacios de queja e intercambio de información pueden contribuir de manera positiva en la tarea de crear conciencia tanto entre los consumidores como los empresarios. "Todo nuevo espacio que le permita a la gente opinar, bienvenido sea", dijo a LA NACION Sandra González, presidenta de la Asociación de Defensa de los Consumidores y Usuarios de la Argentina (Adecua), una de las más activas en la campaña contra el aumento en el precio del tomate.

Justamente una de las últimas "entradas" del blog noticiasdeconsumo.com.ar , iniciado en marzo de este año por la periodista especializada en derechos del consumidor Daniela Hacker, tiene que ver con el tomate, que del boicot en las calles saltó también al espacio virtual.

Hacker explica allí, con el título "La crónica del tomate", que en el tema particular del aumento de los precios los consumidores no tienen en realidad dónde hacer reclamos, porque los acuerdos sectoriales que impulsa el Gobierno son sólo voluntarios y "no existe ninguna ley que diga que el tomate no puede aumentar". Por eso, observa, son importantes las asociaciones de consumidores y los medios de comunicación, incluidos los blogs: "Al difundir estos aumentos, ejercen una presión para que la situación se regularice -y no nos quedemos con los ficticios números del Indec- y ponen en la agenda política el tema de los precios", señala.

También otros bloggers se ocuparon esta semana del precio del tomate, entre ellos el periodista Darío Gallo, que en blocdeperiodista.com se dispuso a ofrecer un servicio a la comunidad con la ayuda de sus lectores, a los que pidió que informaran en su espacio online qué verdulerías de su barrio ofrecían las mejores ofertas. Una forma más de correr la voz y ejercer presión.

Queda a la vista así que -trátese de un servicio público, de un producto o de un problema tan inasible como lo es la inflación- los blogs son percibidos por muchos usuarios disconformes como un instrumento útil de diversas maneras. "Es una forma más que encontró mucha gente para expresar lo que vive a diario: podrían haber llamado a una radio o escrito una carta de lectores a un diario, pero son gente joven y encontraron esta herramienta que tiene mucho que ver con su generación", señaló Hacker a LA NACION. "Pero no sólo hay queja en los blogs, sino que también incluyen información, propuestas e iniciativas conjuntas de reclamo ante las empresas involucradas o los organismos de control correspondientes", aclaró.

Esto último apunta contra la idea de que todo lo que se dice en este tipo de blogs es insulto fácil y denuncia impune, que también los hay y en copiosa factura porque la Red ofrece, si se quiere, la cobertura del anonimato.

"Hay blogs serios y otros que sólo dicen pavadas o se dedican únicamente a insultar, y las quejas deben quedar plasmadas en un reclamo concreto, si no, no sirven", observó en este sentido la presidenta de Adecua.

Usuarios y bloggers

Casos como el de viajecomoelorto.blogspot.com merecen una mención aparte: allí, en este espacio virtual que es visitado a diario por hasta 1000 personas, Candelaria Schamun, de 26 años y empleada en una agencia de publicidad, desde abril pasado fue volcando sus observaciones cotidianas sobre lo que consideró irregularidades del subte porteño. La movía lo que, en diálogo con LA NACION, llamó simplemente "el deseo de viajar bien y segura". Pero es interesante ver cómo, con las herramientas de interacción social que ofrece ahora la red de redes, de usuaria común y silvestre Candelaria se transformó en una blogger capaz de llamar la atención de miles de personas sobre un problema particular. No por nada, cabe recordar en este punto, en 2006 la revista Time eligió como personaje del año al usuario de Internet. Esto es, a todos los usuarios y su capacidad de crear comunidades virtuales.

"Vi que faltaban mangueras para apagar eventuales incendios, que en algunos matafuegos la carga era baja, que la reposición de estos elementos demoraba en algunos casos hasta dos semanas, que las salidas de emergencia son las entradas y salidas normales y no una vía alternativa... hice una investigación ocular, saqué fotos, me contacté con un ingeniero en seguridad, conversé con los delegados del subte y conseguí información técnica", relató Schamun. Con todo este material elaboró un informe que llamó la atención del periodista Jorge Lanata, quien lo reprodujo en su programa radial, propuso un debate entre Candelaria y la vocera de Metrovías, Lucila Maldonado, y puso al aire un diálogo que se puede bajar desde el blog de la joven.

Ahora, Schamun impulsa un petitorio -para el que ya reunió más de 2000 firmas- dirigido a la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) y a la Secretaría de Transporte, a cargo de Ricargo Jaime. El documento reclama inversiones para mejorar tanto la seguridad como la calidad del servicio en los medios de transporte públicos. Elisa Carrió y Vilma Ripoll están entre los firmantes.

Cada uno a su manera, también se ocupan de la problemática del transporte los blogs usuariosdelroca.blogspot.com , desesperadosdelsarmiento.blogspot.com , x1subteseguro.blogspot.com , pasajerosdelroca.blogspot.com , viajemalencolectivo.blogspot.com y tbamemata.blogspot.com . Todos los responsables de estos espacios coinciden en que la motivación principal fueron los padecimientos cotidianos en el medio de transporte que utilizan a diario para ir a trabajar o a estudiar.

Según Sandra González, si bien las quejas más frecuentes que reciben las asociaciones de defensa de los consumidores tienen que ver con la telefonía celular, es comprensible que los problemas en el transporte merezcan un lugar de privilegio en la blogósfera. "Claramente el sistema de transporte en la ciudad está colapsado: se viaja muy mal y permanentemente hay problemas, y muchos de los que sufren esto son los jóvenes, que además son quienes dominan las nuevas tecnologías".

Pero la atención que merecen trenes, subtes y colectivos no impide que algunos bloggers salten hacia otras áreas de interés y formen alianzas. Como vacas, Viajé como el orto y Noticias de consumo, por ejemplo, juntaron fuerzas y lanzaron la iniciativa Blogs de Usuarios y Consumidores (BUC), que otorga un premio "a lo mejor y lo peor en telefonía móvil, telefonía básica, Internet, TV cerrada y transporte". Cada semana de este mes en la página www.premiosbuc.blogspot.com se abrirá una nueva votación, cuyos resultados se conocerán en noviembre, con el objetivo declarado de que las empresas aprendan a escuchar las quejas de sus clientes.

¿Angeles o demonios?

Algo similar, con idéntico fin, hizo el blog Speedy apesta, que incluye un espacio de ciberprotesta en el que los clientes de la empresa pueden calificar de "ángel" o "demonio" a los operadores de soporte técnico de Speedy según el trato y la atención que les brindaron. Foros similares recogen impresiones sobre los servicios que ofrecen otros proveedores de Internet, como Arnet, Advance y Ciudad Internet.

En rigor, ésta no es una idea novedosa. En otros países hace ya algún tiempo sobran los ejemplos de empresas que hacen una lectura regular de los blogs o incluso crean blogs propios para que sus clientes, reales o potenciales, vuelquen allí sus opiniones e inquietudes. De hecho, un estudio de la consultora estadounidense Jupiter Research estima que cerca del 70 por ciento de las empresas norteamericanas podrían contar con un blog propio hacia fines de este año. El diario online de General Motors, por ejemplo, recibe un promedio de 5000 visitas diarias y es seguido de cerca por el área de relaciones institucionales.

Entre otras cosas, estos espacios les permite a las empresas conocer un poco mejor a su público consumidor, trabajar sobre su imagen corporativa allí donde identifican un problema y resolver posibles conflictos. Es decir, los blogs pueden servir de señal de alerta. Pero los blogs corporativos también pueden traer el beneficio de incorporar una herramienta más de promoción y marketing. Hay ejemplos de esto en la Argentina, donde empresas como Fanta, Sedal y Rexona, entre otras, comenzaron a experimentar hace algún tiempo.

Es, también, el caso del Grupo Telefónica, que incorporó el blog tendenciasdigitales.com.ar porque, según explicó a LA NACION su encargada de prensa, Bettina Faure, desde la empresa se observa con interés el fenómeno que está produciendo la web 2.0 en la comunicación y en la construcción de relaciones. "Este blog es parte del programa destinado a fomentar los conocimientos sobre la sociedad de la información en el ámbito académico y en todos los interesados en las cuestiones tecnológicas", explicó.

En el terreno de las quejas de usuarios, sin embargo, todavía queda mucho por hacer en el país. Según Daniela Hacker, pese a la atención creciente que suscita la ciberprotesta y a que hubo casos en que una pequeña historia registrada en un blog llegó a oídos de un empresario que supo reaccionar (sobre lo que se informa aparte), por lo general las empresas no están muy al tanto de lo que ocurre en los blogs ni perciben la dimensión del fenómeno. "Y lo cierto -advirtió- es que algo que comienza en un blog puede terminar en la tapa de un diario."